Black Paradox revela el terror de saber lo que hay al “otro lado”
Doppelgangers, robots suplantando a humanos, monstruos humanos, la futilidad de la vida, el engaño, todas las obsesiones de Junji Ito presentadas en una sola obra. Pero, sobre todo, un estudio sobre la avaricia y el egoísmo humano. Black Paradox nos muestra una posibilidad para conseguir responder la pregunta de las preguntas, pero ¿Qué harán con ello?
Cuatro personas se reúnen de forma clandestina para llevar a cabo un pacto de suicidio. Solas no se atreven, pero juntas llegarán hasta el final. Cada uno con un secreto, el resultado de su aventura terminará creando un misterio mayor, una fuente de riqueza, una fuente de poder, una puerta a otro lugar, el secreto del más allá, o del infierno. Pero si morir juntos era su idea, vivir juntos puede no ser tan fácil cuando existen las ambiciones, los egos, y las mentiras.
Marceau, Borochi, Pitan y Taburo son los protagonistas de este relato que recoge muchas de las obsesiones de Junji Ito, la existencia de seres igual que nosotros, que desean tomar nuestro lugar, el avance tecnológico como amenaza para la humanidad, la belleza, el amor, visto como sentimientos egoístas y superficiales, y, sobre todo, la soledad, no tener un lugar en el mundo. Todo esto se deja ver en esta obra unitaria, pero no domina, son las razones para que todo se mueva, es la gasolina que hace funcionar el motor de esta máquina, que trata otro de los temas más poderosos de Ito, la humanidad y su reacción ante un poder desconocido.
Ito es indudablemente la gran figura del terror japonés actual, y eso es decir mucho cuando hablamos de un país que ha dado y sigue dando grandes autores en este terreno. Pero su terror es mucho más que seres horribles, que los hay, ni sangre y muertes extravagantes, que las hay, sino la mala sensación que deja, el mal cuerpo, el mal “rollo”. Junji Ito explora caminos que nos son ajenos, originales, pero busca el horror de la humanidad. Los sentimientos más poderosos del ser humano, son también su mayor miedo. EL amor nos conduce a hacer horrores, la avaricia nos obliga a comportarnos de la forma más baja. Ito sabe lo que nos debilita, y no son monstruos horripilantes, si nuestro interior, lo que somos, y cómo actuamos frente a estos horrores, o estas situaciones extremas e irreales.
El trazo de Ito es claro y definido, cuenta todo con precisión quirúrgica, no hay nada de más ni de menos. Muestra el horror en imágenes brutales, y nos enseña el terror del ser humano en viñetas y secuencias sencillas y obsesivas con los gestos, los rostros, que son el espejo del alma. Sus composiciones de página suelen tener más viñetas que la mayoría de mangakas, y no las usa únicamente para detalles y gestos, hay primeros planos y acciones importantes en esas pequeñas cajas, produciendo desajustes en la lectura, y cambiando el ritmo, produciendo desazón en el lector. En esos pequeños detalles se encuentra el genio de su dibujo, que no es el mejor, pero transmite todo lo que quiere Ito.
Black Paradox es uno de los mejores mangas para iniciarse en el extraño y peculiar mundo de Junji Ito, tiene muchos de sus puntos fuertes, pero en menos cantidad, de forma que la densidad de la obra es menor que en otras como Uzumaki o Gyo.
Atrévete a darle una oportunidad a este terror, diferente, extraño, que más que asustar, deja mal cuerpo. Atrévete con Junji Ito, y prepárate a sufrir con la gran imaginación de este ex dentista, con una mente extraña y retorcida, y su obra.