Como Robert Downey Jr catapultó el Universo Marvel
En una reciente entrevista a Deadline, el presidente de Marvel Studios Kevin Feige arroja unos cuantos datos interesantes sobre aquella escena concreta. Resulta que la frase I’m Iron Man no estaba en el guión. Se le ocurrió sobre la marcha a Robert Downey Jr en un arrebato de improvisación (Probablemente el gesto de tedio al leer la tarjeta era completamente genuino).
Más tarde, el actor explicaba que aquella frase le pareció mucho más adecuada al personaje, y desde luego lo es. El director Jon Fraveu y la propia Marvel se mostraron de acuerdo y decidieron mantener la escena improvisada en la versión final del film.
La cuestión, como explica Feige, dista mucho de ser una mera anécdota porque en el guión original Tony Stark no revelaba su identidad secreta. Simplemente despachaba a la prensa con unas cuantas excusas más o menos ingeniosas.
Tony Stark ha admitido públicamente en los cómics que es la persona detrás de Iron Man, pero el hecho de admitirlo en el MCU desde su primera película tuvo muchas repercusiones en las películas que llegaron después.
Para empezar, obligó a reconsiderar cuál serían sus aventuras posteriores en Iron Man 2 y 3, pero también hizo que los guionistas decidieran abandonar el personaje del doctor Donald Blake, alter ego de Thor en los cómics durante muchos años. En su lugar, Thor se muestra como asgardiano desde el principio con las consecuencias que todos conocemos. Shield vio en Asgard la excusa de seguridad nacional perfecta para tratar de usar el teseracto en su propio beneficio, permitiendo a Loki acceder a la Tierra y desencadenando los eventos de la primera Avengers.
Todo lo demás es historia.