Diputados favorecen industria de alimentos “chatarra”
Ciudad de México, 24 de marzo de 2015 (Círculo Digital).- Diputados mexicanos desecharon, en una sola sesión, cinco iniciativas para combatir la obesidad, el sobrepeso y la diabetes, debido a las presiones de la industria de comida “chatarra” y de la misma Secretaría de Salud (SSa), denunciaron organizaciones civiles.
“Todo lo que ha hecho la Secretaría de Salud y Cofepris (Comisión Federal para la Protección a los Riesgos Sanitarios) ha sido a favor de la industria”, dijo Alejandro Calvillo Unna, presidente de la asociación El Poder del Consumidor.
El pasado miércoles 18 de marzo, la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados desechó cinco iniciativas presentadas entre el 23 de octubre y el 15 de diciembre de 2014, dirigidas a establecer una ley general y regulaciones efectivas para prevenir y combatir la obesidad y los padecimientos derivados de ella.
De acuerdo con el posicionamiento de la Alianza por la Salud Alimentaria, dichas iniciativas fueron desechadas “tras las declaraciones y presiones […] por parte de la Concamin (Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos), ConMéxico (Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo), empresas de alimentos y bebidas en particular, y con dictámenes elaborados a partir de posicionamientos enviados por la Secretaría de Salud y Cofepris”.
En general, lo que estos proyectos buscaban era establecer un etiquetado frontal en alimentos y bebidas que advierta o que, a manera de semáforo, indique la información nutrimental de un producto de manera clara para que los consumidores puedan hacer elecciones más saludables.
También querían definir una regulación realmente efectiva de la publicidad de alimentos “chatarra” dirigida a los niños, ampliando horarios, edades y medios.
Por último, el objetivo era establecer una Ley General para Prevenir y Atender el Sobrepeso y la Obesidad, que incluía las anteriores peticiones, la definición de requerimientos diarios nutrimentales, así como la formación de un Consejo Nacional para la Coordinación de la Acción Social para la promoción y Prevención de tales padecimientos.
Etiquetado actual, confuso
El argumento central para desechar las dos iniciativas que proponen establecer un etiquetado frontal con un semáforo nutricional, es que ya existe una regulación al respecto y sería una reforma “innecesaria”.
“Este argumento para desechar la iniciativa fue elaborado por Secretaría de Salud y Cofepris, a pesar de que existe la evidencia científica suficiente para demostrar que el etiquetado frontal establecido como parte de la Estrategia Nacional para la Prevención y el Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes, no sólo no es entendible por los consumidores mexicanos, sino que representa un riesgo a la salud de la población por promover el consumo de altas cantidades de azúcar. De esta manera, estas dos instituciones, refrendan su alianza con la industria de la chatarra para mantener el etiquetado y los criterios que esa misma industria diseñó”, establecieron en un comunicado las organizaciones pertenecientes a la Alianza.
El grupo de organizaciones civiles asegura que la regulación actual “viola el derecho a la salud de las personas en relación al derecho a la información, pues la forma en que está diseñado y regulado el etiquetado no permite que conozcan el contenido real de los alimentos y bebidas no alcohólicas. Una de las consecuencias de esta falta de información es que dañen su salud por el consumo de alimentos altos en azúcares añadidos”.
De acuerdo con el pronunciamiento, fueron desechadas también tres iniciativas que proponen la prohibición de publicidad de alimentos y bebidas altas en azúcares, grasas y sal en un horario más amplio de 6:00 a 21:00 horas (actualmente es de 14:30 a 19:30 horas entre semana), ampliar la cobertura a los menores de 16 años (actualmente cubre solamente a los menores de 12 años), incluir otros medios como Internet y los espacios abiertos, además de prohibir en esta publicidad el uso de celebridades y personajes animados, así como de juguetes y promociones, explicaron en conferencia de prensa.
Argumentos
Para desechar las iniciativas, los dictámenes de la Cámara de Diputados argumentaron que implicaría una sobrerregulación, pues ya existe un apartado en la Ley General de Salud en materia de Publicidad. Su segunda razón fue que “las expresiones comerciales están protegidas por la libertad de expresión” y prohibirla resultaría inconstitucional.
Para las Organizaciones No Gubernamentales (ONGs), tal argumento equipara la publicidad de alimentos con el interés superior del niño, garantía incluida en diversos tratados internacionales.
“La Secretaría de Salud está manteniendo criterios nutricionales y una regulación en etiquetado y publicidad que van contra las recomendaciones más recientes de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Establece un etiquetado frontal diseñado por la industria, que los consumidores no entienden y que establece un criterio de consumo de azúcar diario 300 por ciento superior al que la OMS está sugiriendo como el más recomendable para proteger la salud (90 gramos contra 30 gramos)”, dijo Alejandro Calvillo en un comunicado.
A pesar de la evidencia científica, las contradicciones internas y limitaciones de los reglamentos actuales, las estancias gubernamentales siguen beneficiando a la industria, remarcó Calvillo.
Por su parte, las ONGs concluyeron que “tanto la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados como la propia Secretaría de Salud claudicaron ante intereses particulares y económicos, frente al derecho a la salud y su obligación de garantizar un ambiente sano y propicio para el bienestar social. (Con información de sinembargo.mx)