EEUU contra Google, un gran juicio antimonopolio

Google es sinónimo de búsqueda de información en línea y ha aprovechado el enorme éxito de su herramienta de búsqueda para construir un negocio gigantesco que abarca la publicidad, la computación en la nube y YouTube, la potencia del video en línea.
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Agencias, Ciudad de México.- Un juez federal comenzará a escuchar las acusaciones del Departamento de Justicia y de un grupo de estados en contra de Google por un supuesto abuso de poder de forma monopólica sobre los servicios de búsqueda en línea.

Google es sinónimo de búsqueda de información en línea y ha aprovechado el enorme éxito de su herramienta de búsqueda para construir un negocio gigantesco que abarca la publicidad, la computación en la nube y YouTube, la potencia del video en línea.

El resultado del juicio tendrá consecuencias más extensas que el negocio de Google. Observar bajo un microscopio décadas de prácticas de Silicon Valley será un indicio del éxito de los reguladores de Estados Unidos en sus esfuerzos por frenar el poder de las grandes empresas tecnológicas.

¿De qué se trata este juicio?

Un juez sopesará si, como arguyen el Departamento de Justicia y un grupo de estados, Google abusó de su poder como si fuera un monopolio. Es el primer juicio por monopolio contra un gigante tecnológico desde el proceso histórico contra Microsoft hace más de 20 años.

En las décadas que han pasado desde entonces, Google ha acumulado el 90 por ciento del mercado de los motores de búsqueda en Estados Unidos y el 91 por ciento a nivel mundial, según Similarweb, una firma de análisis de datos.

¿Por qué es importante?

Si Google pierde este caso, el fallo en contra podría socavar su importancia e influencia en la industria tecnológica, algo que podría limitar la forma en que Google puede competir en el mercado y reorganizaría el poder en Silicon Valley.

También es una prueba para los gobiernos que aseguran que los gigantes tecnológicos como Google, Apple, Amazon, Microsoft y Meta, la empresa dueña de Facebook e Instagram, tienen demasiada influencia en nuestras vidas en línea. Las leyes antimonopolio del país se redactaron hace más de un siglo y este juicio demostrará si se pueden utilizar para frenar la veloz industria tecnológica.

¿De qué se le acusa a Google?

El Departamento de Justicia ha acusado a Google, con sede en Mountain View, California, de utilizar de forma ilegal asociaciones con fabricantes de teléfonos y empresas de navegadores de internet para dejar fuera a motores de búsqueda rivales.

Gracias a acuerdos con empresas como Apple, Samsung y Mozilla, Google ha sido el motor de búsqueda predeterminado cuando miles de millones de usuarios de internet abren un navegador en sus teléfonos, tabletas y computadoras personales. El gobierno ha argumentado que los pagos multimillonarios de Google a sus socios han impedido que otros motores de búsqueda como Bing de Microsoft y DuckDuckGo acumulen una participación significativa del mercado de búsquedas en línea.

El Departamento de Justicia también alega que la práctica de Google de precargar sus servicios en los dispositivos que utilizan su software Android ayudó de manera ilegal a la empresa de internet a mantener un monopolio.

¿Qué responde Google?

Google afirma que sus prácticas comerciales son legales y habituales y que, cuando paga por aparecer en el navegador Safari de Apple o en Firefox de Mozilla, el acuerdo es similar al de un fabricante de cereales que les paga a los supermercados para que coloquen sus cajas a la altura de los ojos.

El gigante de las búsquedas también ha argüido en repetidas ocasiones que tiene varios competidores exitosos en las búsquedas en línea. Para la empresa, firmas como Amazon y TikTok son competidores boyantes. Aunque no operan motores de búsqueda de propósito general, Google argumenta que son destinos rivales donde acuden los consumidores para encontrar productos o contenido que eluden por completo a Google.

Google también ha señalado que el gobierno está utilizando un argumento erróneo para atacar a la empresa debido a su popularidad. La empresa cree que tiene éxito porque fabrica el mejor motor de búsqueda. La empresa argumenta que los consumidores tienen la opción de utilizar otros motores de búsqueda, pero eligen a Google porque les parece más útil.

¿Qué debe probar el gobierno para ganar su caso?

El gobierno debe demostrar que en el caso Google tiene un poder monopólico sobre las áreas de la economía en cuestión. El gobierno intentará persuadir al juez para que adopte una visión relativamente estricta de lo que es un motor de búsqueda y rechace el argumento de Google de que sitios de comercio electrónico como Amazon y servicios de redes sociales como TikTok o Instagram están en el mismo mercado que el motor de búsqueda de Google. Mientras más amplio sea el mercado, más fácil le será a Google argumentar que no tiene poder monopólico.

El gobierno también debe demostrar que los acuerdos comerciales de Google redujeron de manera significativa la competencia entre los motores de búsqueda pues se les negó la oportunidad de forjar acuerdos similares con fabricantes de dispositivos o conseguir nuevos clientes. Es probable que el Departamento de Justicia también tenga que explicar cómo estas prácticas comerciales perjudicaron de forma directa o indirecta a los consumidores, lo cual durante décadas ha sido un obstáculo importante para los jueces que sopesan casos antimonopolio.

¿Qué ocurrirá si Google es declarado responsable de infringir la ley?

El juicio será en dos partes. Primero, el juez Amit P. Mehta del Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito de Columbia determinará si Google infringió la ley. En caso de que así sea, Mehta considerará posibles formas de solucionar la situación.

El Departamento de Justicia todavía no ha mencionado qué medidas le pediría al tribunal que le imponga a Google en caso de salir victorioso.

“Pero todo empieza cuando el tribunal quede convencido de que Google procedió mal”, comentó Bill Baer, un exfuncionario del Departamento de Justicia.

El presidente de asuntos globales de Google, Kent Walker, enfatizó el desafío de encontrar una solución adecuada sin obligar a otras empresas que no han sido demandadas, como Apple y Samsung, a cambiar sus prácticas comerciales.

Es posible que el Departamento de Justicia pida que Google tenga prohibido firmar acuerdos de distribución exclusiva para darles a otros motores de búsqueda más prominencia en los dispositivos de los consumidores.

Con información de The New York Times

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