Epic Games demanda a un jugador menor de edad por trampas en Fortnite
Epic Games ha hecho lo posible para conservar intacta la experiencia de Fortnite. La compañía optó por iniciar un proceso legal en contra de toda persona que hiciera trampas o empleara software de terceros para ganar ventaja. Como resultado, un jugador sueco y uno ruso ya enfrentan cargos legales. Si bien este método de control ha sido efectivo, también ha implicado algunos problemas para el estudio.
La compañía no contaba con que uno de los últimos jugadores sancionados y llevados a la corte era un menor de edad. El joven de 14 años usó software adicional para ganar ventaja. No obstante, su madre ha salido a defenderlo a capa y espada. La mujer argumenta que Epic no puede demostrar que el comportamiento de su hijo se traduce en pérdidas económicas.
Además, la madre dice que Epic está usando a su hijo y demás jugadores como chivos expiatorios. Por tal motivo, deberían de ir a la raíz del problema y mejor combatir a las empresas que distribuyen el software prohibido. Por si fuera poco, la mujer señala que su hijo no colaboró en el desarrollo de la herramienta ilegal. Por último, la madre prometió emprender acciones legales en contra del estudio si revelan información sobre el chico.
En una carta remitida directamente al estudio, la madre pone de manifiesto algunas cuestiones cuanto menos dudosas en el proceso legal iniciado por Epic. Entre ellas:
- Los términos de juego de Fortnite requieren el permiso para los jugadores menores de edad, y ella nunca ha dado ese consentimiento.
- La demanda se basa en la pérdida de beneficios para el estudio, pero Fortnite es un juego free-to-play, y el estudio no ha aportado pruebas de que el comportamiento de su hijo haya causado una masiva pérdida económica.
- Epic está usando a un jugador de 14 años y a otros jugadores individuales como cabezas de turco en lugar de ir a por los sitios web que facilitan el software necesario para hacer este tipo de trampas.
- Su hijo no ayudó a desarrollar el software. Tan solo lo descargó, y Epic no puede proporcionar pruebas de que el menor haya modificado el código de ese software.
- Al hacer público el nombre del menor, Epic ha violado las leyes de protección de datos del estado de Delaware relativas a la privacidad de menores de edad.
Algo que sobresale del caso es que, por supuesto, no es posible demandar legalmente a un menor. Así pues, se estima que Epic no corroboró los datos del jugador antes de iniciar el proceso de denuncia. De acuerdo con los informes, el software en cuestión tiene un costo de entre $5 USD y $15 USD. Dentro de las políticas del estudio, la herramienta implica violación de derechos de autor, pues modifica el código de Fortnite.
Por su parte, el estudio afirmó: “Epic no aprueba las trampas o las infracciones de derechos de autor, no importa la edad de la persona de la que provengan. Nos tomamos en serio a los tramposos y seguimos todas las opciones disponibles para asegurarnos de que nuestros juegos son divertidos, justos y competitivos para los jugadores”.
Por el momento, no hay detalles sobre la decisión final de Epic y la forma en que el chico podría ser sancionado. Sin duda es una situación delicada, que podría implicar más problemas que beneficios para el estudio. El enfado de la madre no ha hecho que Epic modifique su curso.