Estas son 3 recomendaciones para evitar que tus emociones te dejen sin dinero

Tu relación con el dinero está directamente relacionada con tres factores: tu historia familiar, cómo aprendiste sobre él (generalmente por ensayo y error) y las emociones que te provoca.

Paola Murillo Calderón, especialista en educación financiera y psicóloga, explica que hablando específicamente de las emociones y cómo inciden en nuestras decisiones financieras, debemos entender cómo funciona el cerebro.

“El cerebro está diseñado para sobrevivir, entonces dependiendo de los estímulos que recibimos actúa como una forma de protegernos de peligros”, explica.

Este tipo de estímulos pueden ser las emociones que son inmediatas, impulsivas y de las cuales a veces perdemos el control. Ahora la pregunta es: ¿cómo podemos regularlas?

Murillo Calderón explica que a través de la economía del comportamiento se ha descubierto que los estados emocionales intensos, como los provocados por la euforia, hacen que no pensemos y tomemos decisiones impulsivas.

Por ejemplo, saliendo del concierto de tu artista favorito, con toda la adrenalina encima, te encuentras un puesto en donde compras una taza solo porque trae su foto. Ya con la cabeza fría te das cuenta que tienes 20 más de esas tazas, y dudas de tu compra impulsiva.

Y así podemos hablar de emociones como la tristeza, que muchos se quitan haciendo turismo por los centros comerciales. Esto también aplicó a la confusión al inicio de la pandemia, cuando impulsada por rumores la gente comenzó a comprar papel de baño, al grado que se agotó.

Consejos para tomar una decisión financiera importante con una emoción a cuestas

La especialista en educación financiera también recomienda algunos pasos que te ayudarán a regular tus emociones para que puedas tomar decisiones financieras importantes:

1. Respira con la regla de cuatro

Inhala en cuatro tiempos, mantén el aire en cuatro tiempos y exhala en cuatro tiempos. Repite esto (lo adivinaste) cuatro veces.

2. Registra tus gastos

No podía faltar el registro de tus gastos. Aunque es algo que has escuchado en muchas ocasiones, te tenemos una noticia: lo seguirás escuchando. Pues es un básico para mantener tus finanzas bajo control.

Pero en el caso de las emociones, te ayudará a ver que no todo es impulso, también existe una realidad y esa es que tal vez no puedas pagar eso que quieres comprar, porque tus ingresos simplemente ya no dan. No hay nada mejor para aterrizar una emoción que la realidad.

3. Haz un presupuesto

Tampoco puede faltar hacer un presupuesto si quieres mejorar tu relación con el dinero, pues te ayudará a planear.

El presupuesto da un orden, tranquilidad y control. Sería importante que consideres además los rubros de tus gastos fijos y variables, estos no son mencionados con regularidad pero también tienes derecho a disfrutar de tu dinero. Por eso debes contemplar un rubro de entretenimiento, imprevistos, incluso esos pequeños o grandes gustos que te quieres dar.

¿Cómo puedes controlar tus emociones para que no afecten tus finanzas?

Paola Murillo Calderón asegura que las emociones son sanas, pero debemos aprender a manejarlas. En el caso del dinero podemos tener autocontrol y dejar pasar la emoción para después tomar la decisión correcta.

Por ejemplo, si eres de los que ir de compras le ayuda a sobrellevar la tristeza y vas a un centro comercial arrasando con todo lo que se te pone en el camino, lo mejor que puedes hacer es si te gusta algo, dejar la compra pendiente. De esta manera, y ya con la cabeza fría, podrás pensar si realmente necesitas comprarlo o solo fue una decisión basada en la emoción que sentías en ese momento.

Otro truco que puedes poner en práctica es autosabotearte. Si te encanta hacer turismo en el centro comercial cuando estás contento o triste, lo mejor es dejar la tarjeta de crédito olvidada en un cajón. Así, aunque quieras, no podrás gastar.