Gabriel Melgarejo va del rock a la cumbia y a la salsa

Su historia comenzó con una clase de guitarra en la adolescencia y un gusto inicial por el flamenco que, con el tiempo, lo llevó a explorar el rock, el blues y, finalmente, la cumbia. Su incursión en este género se dio de manera casual, cuando un grupo de amigos organizó una fiesta y decidieron tocar covers; lo que comenzó como un juego se convirtió en una carrera cuando la respuesta del público lo llevó a componer sus propias canciones, abriendo un nuevo capítulo en su vida musical.

La cumbia fue solo el inicio. En su búsqueda por expandir su identidad artística, Gabriel se encontró con la salsa, un género que describe como un espacio lleno de raíces, historia y energía social. Durante la pandemia, esta música se convirtió en su refugio creativo y en el punto de partida de un proyecto donde la pasión y el ritmo se fusionan en una propuesta auténtica y con profundidad cultural. Desde entonces, su trayectoria ha estado marcada por la experimentación y la construcción de un sonido propio.

Bajo el nombre de El Rey del Swing, Gabriel ha consolidado un personaje que nació de manera improvisada en redes sociales, pero que con el tiempo tomó forma hasta convertirse en otra de sus identidades artísticas. Lo que inició como un apodo, se transformó en un concepto con el que explora no solo la música, sino también su visión del mundo, combinando elementos de la poesía, el arte visual y la filosofía.

Grupo Tropical Los Gorriones

Actualmente, Gabriel divide su tiempo en tres proyectos que le permiten explorar distintas facetas musicales. Con el Grupo Tropical Los Gorriones, busca romper barreras sociales a través de la cumbia, un género que considera universal y capaz de unir a públicos de diferentes contextos. En La Bendición, su proyecto de salsa, rescata las raíces rituales y sociales del género, reivindicando su esencia como un espacio de resistencia desde la celebración. Con El Rey del Swing, su proyecto más personal, experimenta con lo abstracto y lo introspectivo, llevando la música hacia un terreno más conceptual.

Su trayectoria no sólo se limita al escenario. Como productor, ha trabajado en proyectos para cine y televisión, consolidándose como una figura versátil dentro de la industria musical. Su formación en comunicación y su interés en temas sociales han moldeado su visión artística, llevándolo a usar la música como una herramienta para generar conciencia y reflexión. Para él, la música no es únicamente entretenimiento, sino un lenguaje que puede inspirar, provocar y transformar.

Lejos de limitarse a un solo género, Gabriel se deja guiar por la intuición, explorando ritmos que se sienten como una extensión natural de su identidad. Aunque su imagen pueda sugerir una inclinación hacia la música urbana, él siente que fueron la cumbia y la salsa las que lo eligieron, marcando un camino donde la tradición y la innovación conviven en armonía. En cada uno de sus proyectos, busca construir nuevas historias que trasciendan las diferencias, convencido de que la música tiene el poder de unir, derribar barreras y crear conexiones genuinas con el público.

Su historia es la de un artista en constante evolución, que encuentra en la diversidad de sonidos y estilos una oportunidad para enriquecer su creatividad. Desde las calles hasta los escenarios, desde la cumbia hasta la salsa, Gabriel Melgarejo sigue explorando nuevos territorios, llevando su visión musical a públicos cada vez más amplios, con la certeza de que la música, en todas sus formas, es un espacio para el encuentro y la transformación.