Instagram se convirtió en un plataforma para el comercio de armas y la guerra entre pandillas en EEUU
Richard E. Connors, un agente especial de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de EE.UU., asegura que Instagram se ha convertido en un epicentro para el comercio indiscriminado de armas y para que se incentive la rivalidad y la guerra entre pandillas callejeras.
Connors estuvo monitoreando y revisando las cuentas de algunos presuntos miembros de una pandilla de la ciudad de Milwaukee (Wisconsin) que se hace llamar Wild 100 durante aproximadamente cinco meses. En ese tiempo descubrió que la banda mantenía con otra, conocida como Ghetto Boy Clique, una disputa que incluía tiroteos y asesinatos, recoge un artículo al respecto publicado por el portal Vice.
“He observado a los miembros conocidos de Wild 100 publicar, alardear y etiquetarse constantemente entre sí en actividades con armas de fuego, que incluyen delitos federales, al menos una vez a la semana”, aseguró el agente.
En concreto, Connors siguió los pasos en la red social de los hermanos Teshae y Quishawn Hanna y Larry G. Hamilton, todos afiliados a la organización criminal ya mencionada, y encontró conversaciones en las que discutían sobre posesión y venta de armas, incluso sobre la comercialización de algunas de ellas con dispositivos que permiten, por ejemplo, convertir una pistola Glock en un arma totalmente automática no registrada, algo que ellos no podrían haber adquirido legalmente.
Detalla también que los delincuentes hacen uso de todas las funciones de la plataforma (mensajes privados, publicaciones, historias y trasmisiones en vivo) para sus negocios ilegales y para dar a conocer su fuerza e intimidar a sus rivales.
Entre el material que encontró, destaca un video de Instagram Live en el que Teshae y Quishawn mostraron pistolas y rifles de asalto AR-15. Además, en la sección Instagram Stories, Hamilton y Teshae compartieron fotografías donde se aprecia distintos tipos de armas. En otra publicación, Hamilton reveló una foto que incluía una Glock con un convertidor.
Connors dio a conocer esta problemática en una solicitud judicial de carácter público el pasado 14 de junio, que busca que Facebook, propietario de Instagram, entregue a los tribunales toda la información y datos de las cuentas de los individuos involucrados para iniciar un proceso legal en su contra. De acuerdo con Vice, esos tres perfiles siguen activos dentro de la red social y, aunque a la compañía se le solicitó que comentara el asunto, hasta el momento no ha proporcionado una declaración al respecto.