Luchan contra el racismo a través de un cómic afrobrasileño
Un cómic creado por un artista brasileño da vida a superhéroes y heroínas negros basados en las divinidades de la naturaleza de las prácticas ritualísticas afrobrasileñas del Candomblé. La principal batalla de los cada vez más famosos superhéroes del cómic brasileño ‘Cuentos de los Orixás’ es combatir el racismo implícito en la escasez de figuras negras como referentes culturales. Ilustrado y escrito por Hugo Canuto, artista del estado de Bahía, la obra narra una aventura para salvar al planeta.
“En tiempos remotos, dioses y héroes caminaban entre los hombres. Lidiaron batallas con furor, enseñaron a curar y a tratar la tierra, el hierro y el fuego. Reinaron y amaron con la misma intensidad”, describe la sinopsis de esta novedosa historia en viñetas.
Superhérores y heroínas afrobrasileños de cómic para combatir el racismo
“Mi idea era llevar para el lenguaje del cómic, que es un lenguaje universal y popular, un recorte de este universo mítico y espiritual que son los Orixás y valorizar esta herencia africana”, explicó Canuto con motivo del lanzamiento de su obra, que cumplió esta semana un año desde su publicación en enero de 2019. “Las historias moldean el mundo”, declara Canuto en entrevista a RT. “La ficción, en general, alcanza un gran público. Se puede generar una reflexión social al mostrar personajes de otras etnias que ocupan espacios importantes”.
Su propósito, como él mismo aclara, no es que las aventuras traten sobre asuntos específicos de las religiones de matriz africana, sino crear personajes a partir de los mitos y leyendas afrobrasileños para dar más espacio en la escena cultural a héroes y heroínas negros. Entre los personajes destacan Iemanjá, reina del mar; Oxum, reina de las aguas dulces, del oro y del amor; Xangó, rey del fuego y de los truenos; Iansã, reina de los vientos y tempestades; Ogúm, rey de la guerra, del metal y del fuego; Oxóssi, rey de la caza; Nanã, la divinidad más antigua, reina del fango, de la fecundidad y de la muerte, y Exú, guardián de la calle y de los cruces de caminos, mensajero entre los dioses y los humanos, entre otros.
Mi obra surge en un momento muy necesario puesto que la intolerancia religiosa y el racismo continúan muy presentes, principalmente en el ambiente escolar, donde (el actual Gobierno) sugiere excluir obras de autores negros o de otros como Jorge Amado
Para Canuto, ‘Cuentos de los Orixás’ es una contribución para la lucha antirracista en Brasil, donde “la herencia de la esclavitud continúa moldeando la sociedad hasta el día de hoy”. El autor añade que toda su creación artística tiene como objetivo contribuir para la reflexión y el cambio social. “Mi obra surge en un momento muy necesario puesto que la intolerancia religiosa y el racismo continúan muy presentes, principalmente en el ambiente escolar, donde (el actual Gobierno) sugiere excluir obras de autores negros o de otros como Jorge Amado que aborden estos asuntos”. Si bien él especifica que siempre ha tenido cuidado para que su cómic atraiga a todos los públicos, reconoce que su objetivo primordial era llegar a los más jóvenes para que “las nuevas generaciones puedan desarrollar otro punto de vista sobre estos asuntos”.
En un estudio realizado por el Centro de medios de la mujer (Women’s Media Center, WMC) y por la BBC en 2018 con entrevistas a unos 2.500 niños, niñas, madres y padres en Estados Unidos, el 70% de los jóvenes que se reconocían como afroamericanos o hispánicos, afirmaban que deseaban ver más protagonistas que se pareciesen a ellos físicamente. Según respondieron los entrevistados, los superhéroes son figuras modelo que, cuando se sienten identificados, les hace sentir más fuertes, valientes y seguros de sí mismos, entre los tres adjetivos más citados por los cuestionados.
En este contexto, el cómic ‘Cuentos de los Orixás’ viene a sumar su contribución al debate público ya atizado por otras creaciones, como la reciente película Black Panther, que tuvo un enorme éxito de taquilla y donde la mayoría de los protagonistas son personas negras. Este filme se basa en Pantera Negra (T’Challa), el primer superhéroe de piel negra creado por Marvel en 1966. A pesar de que en los años 90 en Estados Unidos nacieron incluso editoras, como Milestone Comics, enfocadas en crear personajes negros, su protagonismo continúa siendo minoritario hasta el día de hoy y la representatividad de heroínas mujeres negras es aún más escuálida. Una de las pocas heroínas negras que se ha hecho conocida es Tormenta, que apareció por primera vez en 1975 en X-Men.
En la encuesta del WMC, el 63% de las niñas entre 10 y 19 años autoidentificadas como “de color” (afroamericanas o hispánicas) afirmaron que ver más heroínas como ellas las ayuda a “sentir que pueden conquistar sus objetivos”. En este estudio, los tres personajes de ficción más votados por los jóvenes entrevistados fueron en orden de importancia: la Mujer Maravilla (citada principalmente entre las chicas), Batman (entre los chicos) y Pantera Negra (entre los jóvenes afroamericanos).
El origen mitológico de los superhéroes y heroínas negros inspirados en los Orixás
Las prácticas ritualísticas de origen africano que perduran hasta hoy en el continente americano van desde la Santería hasta la Umbanda y el Candomblé, entre muchas otras, y presentan diversos grados de sincretismo ya que durante muchos años estuvieron prohibidas. Aún a día de hoy, algunos de sus practicantes continúan enfrentando ciertas discriminaciones, motivo por el que Canuto decidió crear personajes negros basados en estas religiones, principalmente en el Candomblé, para rendirles homenaje y cuestionar algunos de los prejuicios existentes.
El arte es política, los cómic son política y, en el actual escenario brasileño de atraso, de ignorancia y de barbarie, es importantísimo hablar y crear arte que aborde estos asuntos
El Candomblé es una creencia animista, es decir, que basa sus principios en el ánima o alma de la Naturaleza, y surgió en el siglo XIX en el estado brasileño de Bahía. Esta fue una de las regiones de Brasil que recibió mayor número de personas esclavizadas provenientes de diversas partes de África, cada una con sus creencias, sus prácticas rituales y sus idiomas. Según diversos factores, se establecieron ciertas clasificaciones, como la Yorubá que incluye hablantes de lenguas derivadas de este tronco lingüístico provenientes, generalmente, del territorio donde hoy se ubican Nigeria, Benín y Togo. En las prácticas ancestrales, cada grupo Yorubá podía adorar a un solo Orixá o elemento de la naturaleza, aunque con la agrupación de los africanos en el territorio brasileño estos acabaron incluyendo todas las divinidades dentro de las posibilidades de culto del Candomblé.
Los Orixás son arquetipos milenarios de fuerza, valentía y sabiduría, según destaca Canuto que encontró en estas figuras la inspiración para superhéroes y superheroínas. “El arte es política, los cómic son política y, en el actual escenario brasileño de atraso, de ignorancia y de barbarie, es importantísimo hablar y crear arte que aborde estos asuntos”.
Tras la creación de esta historia, que implicó un profundo proceso de investigación social y académica durante los dos años y medio de elaboración, Canuto se propuso donar más de 100 ejemplares a escuelas públicas y bibliotecas en el estado de Bahía, como forma de contribución con la ley nacional que establece como obligatoria la enseñanza de la historia afrobrasileña y africana en la educación primaria y secundaria obligatoria, tanto pública como privada. Además, Canuto distribuye gratuitamente su cómic en instituciones culturales y centros de Candomblé, aunque expresa que también intenta llegar a personas que no están tan familiarizadas con estos asuntos. “Para mí, los mayores reconocimientos son mostrar mi tierra y su cultura a un público internacional, así como recibir el respeto de todas esas personas negras a las que yo pretendo homenajear con la obra”.