Microsoft hace concesiones para que se apruebe compra de Activision
La adquisición por 69,000 millones de dólares de Activision Blizzard por parte de Microsoft logró una nueva oportunidad para conseguir la aprobación de los reguladores del Reino Unido después de que el gigante tecnológico presentara al organismo de control antimonopolio del país un acuerdo sustancialmente diferente.
En una inusual medida, la Autoridad de Mercados y Competencia (CMA, por sus siglas en inglés) abrirá una nueva investigación después de que Microsoft dijera que le daría al editor francés de videojuegos Ubisoft Entertainment SA los derechos streaming en la nube para los juegos de Activision, lo que podría aliviar las preocupaciones sobre su potencial para controlar este mercado incipiente, pero de rápido crecimiento. La CMA fijó el 18 de octubre como el nuevo plazo para un fallo inicial.
El vuelco de la decisión de CMA sigue a una serie de drásticos giros. Se pensaba que la propuesta compra no había prosperado tras enfrentar preocupaciones de una serie de organismos antimonopolio, pero cobró un inesperado impulso después de que Microsoft superara el desafío judicial de la Comisión Federal de Comercio por el acuerdo. En mayo, la Unión Europea aprobó el trato con compensaciones, con lo que la CMA, que impidió la transacción en abril, se transformó en el único obstáculo.
El acuerdo revisado otorga a Ubisoft los derechos exclusivos de streaming fuera del Espacio Económico Europeo de todos los títulos de Activision Blizzard, incluido Call of Duty, durante los próximos 15 años. Dentro del bloque, Ubisoft tendría los derechos de streaming no exclusivos de los mismos títulos.
Los términos financieros del acuerdo no se dieron a conocer. Pero la CMA dijo que la transacción apunta a ofrecer un proveedor de contenido externo independiente con la capacidad de suministrar el contenido de juegos de Activision, incluidos exitosos juegos como Call of Duty, a otros proveedores de servicios de juegos en la nube.
Eso incluiría al propio Microsoft y a Luna, de Amazon, que compite con Xbox, de Microsoft. Ubisoft cuenta con su propio servicio de streaming en la nube, conocido como Ubisoft+, que cobra 14.99 dólares al mes para acceder a más de 100 juegos de computadora. El regulador también dijo que Ubisoft podría exigir que Microsoft proporcione versiones de juegos en sistemas operativos distintos de Windows. En teoría, Ubisoft podría obligar a Microsoft a hacer una versión de Call of Duty para la plataforma de streaming en la nube de Apple, por ejemplo.
Tanto Microsoft como Activision registraban leves alzas en Nueva York el lunes. Si bien eso es más bajo que el precio de oferta de Microsoft, de 95 dólares, la brecha se ha reducido, lo que sugiere que el mercado espera que finalmente se cierre el acuerdo. Ubisoft, propietaria de la franquicia de Assassin’s Creed, subía en París.
“Antes teníamos una preocupación real de que Microsoft pudiera controlar la forma en que se desarrollaría ese mercado”, dijo Sarah Cardell, directora ejecutiva de la CMA, en una entrevista en Bloomberg Radio. “Lo que vemos con este nuevo acuerdo, y tendremos que probarlo cuidadosamente a través de nuestra revisión, es que, en lugar de que Microsoft pueda controlar cómo se usan esos derechos de streaming en la nube, ese control pasará a una empresa independiente”.
Se espera que el mercado de juegos en la nube crezca a 8,200 millones de dólares para fines de 2025, frente al estimado de 2,400 millones de dólares para fines de 2022, según la firma de análisis de juegos NewZoo. Eso se compara con el mercado total de videojuegos de alrededor de 183,000 millones de dólares.
“Bajo la transacción reestructurada, Microsoft no estará en condiciones de lanzar juegos de Activision Blizzard exclusivamente en su propio servicio de streaming en la nube —Xbox Cloud Gaming— ni de controlar exclusivamente los términos de licencia de los juegos de Activision Blizzard para servicios rivales”, dijo Microsoft en su propio comunicado.
La CMA ha dicho que prefiere soluciones estructurales para abordar las preocupaciones sobre fusiones que obstaculizan la competencia. Para satisfacer esa preferencia, Microsoft y Activision han estado buscando una venta que convenza a los reguladores sin perjudicar lo que Microsoft considera las partes clave de la adquisición. Por ejemplo, el gigante del software descartó públicamente vender la franquicia de Call of Duty.
Según el acuerdo reestructurado, Microsoft no podrá publicar juegos de Activision como “Overwatch” y “Diablo” exclusivamente en su propio servicio de streaming en la nube -Xbox Cloud Gaming- ni controlar en exclusiva las condiciones de licencia para los servicios rivales. En su lugar, su rival francés Ubisoft adquirirá los derechos de streaming en la nube de los juegos de Activision para PC y consolas, así como de cualquier juego nuevo que lance Activision en los próximos 15 años.
Esto se aplicará en todo el mundo, pero no en Europa, donde Bruselas ya había aceptado el acuerdo original. En Europa, Ubisoft obtendrá una licencia no exclusiva de los derechos de Activision para poder ofrecer esos juegos también en esa región.
Los reguladores antimonopolio de la UE están examinando si la propuesta de Microsoft para obtener la aprobación del Reino Unido afectaría a sus concesiones a la Comisión Europea, según un portavoz. Las acciones de Activision subían un 1% tras la apertura del mercado estadounidense, mientras que las de Microsoft ganaban un 0.8%.
Microsoft dijo que creía que su nueva propuesta era “sustancialmente diferente” y que esperaba que fuera revisada por la CMA antes del 18 de octubre. La CMA dijo que examinaría el nuevo acuerdo con arreglo a su sistema habitual, con un proceso de fase 1 que terminaría el 18 de octubre. Si sigue teniendo dudas sobre el impacto en la competencia, la CMA podría abrir una Fase 2 de examen mucho más larga.
Las dos empresas estadounidenses ya han ampliado el plazo del acuerdo -retrasándolo tres meses, hasta el 18 de octubre- después de que el proceso regulatorio se alargó más de lo previsto.