Sam Raimi reveló que no quería un cameo de Stan-Lee en la película de Spider-Man

Stan Lee, la mente creativa que revolucionó el mundo del cómic y ayudó a generar miles de millones de dólares en Hollywood al darle debilidades humanas a superhéroes como Spider-Man, Los Cuatro Fantásticos y Hulk, falleció el lunes a los 95 años de edad.
El director Sam Raimi, conocido por la trilogía de Spider-Man, dijo a THR que aunque lo ama ahora, originalmente pensó que Stan Lee tuviera un cameo en Spider-Man no era una buena idea.
“Obtuve el trabajo para Spider-Man en 1999”, dijo Raimi. “Y Avi Arad [Jefe de Marvel] dijo, ‘Quiero que pongas a Stan en la película’, y yo dije. ‘No, conozco a Stan, y él no puede actuar’. Y Avi dijo ‘Lo quiero en la película. Lo hicimos para X-Men, lo vamos a hacer aquí’. Ahora imagína que eres un director menor en Inglaterra haciendo Macbeth y te dicen, ‘Pon al escritor en la obra’. Suena absurdo. ‘Bueno, quieres a Shakespeare en la obra, pondré a Shakespeare en la obra’. Ahora es una de mis partes favoritas en la película”.
La relación de Raimi con Lee comenzó a inicios de los 90s cuando Lee llamó a Raimi y dijo que le gustaba Darkman. Lee lo llevó a comer y dijo que deberían de trabajar en algo juntos. Los dos terminaron escribiendo tratamientos para una película de Thor, la cual fue presentada a Fox.
“[Ellos dijeron] Absolutamente no. Los comics no hacen buenas películas”, dijo Raimi. “Esto era 1991”.
