Sismo económico en las compañías de videojuegos por temor a nueva suspensión en China

Las acciones de videojuegos de Europa y Estados Unidos cayeron el jueves, tras reportarse una suspensión de aprobaciones para juegos en línea en China, empañando las perspectivas de nuevos negocios en el mayor mercado de videojuegos del mundo.

Personas con conocimiento del asunto dijeron al South China Morning Post que Pekín suspendió de forma temporal la aprobación de todos los videojuegos en línea nuevos, en una ofensiva para frenar la adicción entre los jóvenes.

Los valores de Tencent cayeron el 8,48% y las de NetEase un 11% en una jornada. Los títulos de otras grandes tecnológicas también cayeron: Meituan (-4,75%) Xiaomi (-3,67%) y Alibaba (-5,79%). Lastrado por esta dinámica, el índice Hang Seng de dicha bolsa descendió el 2,3%, incapaz de ser compensado por el rendimiento de otros sectores.

Las cotizaciones entraron en rojo ante las noticias de que los reguladores chinos citaron a los representantes de las compañías de videojuegos para asegurarse de que dichas empresas cumplan con las nuevas reglas anunciadas para el sector el mes pasado.

Xinhua informa que las empresas fueron avisadas para que “impidan de manera resoluta tendencias incorrectas, como centrarse solo en los beneficios y el tráfico, y cambien las reglas y diseños de juegos que causan que uno se pierda en ellos“.

Tencent y NetEase anunciaron su preparación para acatar las nuevas medidas contra la adicción de los menores, informa la CNBC.

A finales del mes pasado, China anunció una nueva norma para los cientos de millones de jugadores jóvenes menores de 18 años del país: limitó el tiempo de uso de videojuegos a 3 horas a la semana, prohibiendo su utilización total de lunes a jueves y solo se permitirá jugarlos una hora al día entre las 8 y 9 de la noche, los viernes, los fines de semana y en días festivos.

“No son buenas noticias, punto. Es otro ejemplo del ‘jenga’ chino y la ofensiva contra las empresas con influencia, monopolio y escala”, dijo Neil Campling, jefe de la firma de análisis de tecnología, medios y telecomunicaciones Mirabaud, con sede en Londres.

Estas nuevas medidas, anunciadas por la Administración Nacional de Prensa y Publicaciones, van destinadas a frenar lo que las autoridades describen como adicción de los jóvenes a los videojuegos y a la que culpan del impacto de la salud física y mental de los menores, así como de males sociales, incluida la distracción de los niños de sus responsabilidades escolares y familiares.

“La última suspensión ‘temporal’ de aprobación de juegos duró nueve meses. Afectó a todo el sector en términos de crecimiento y compresión de la valoración de las acciones”, agregó.

Estas restricciones se aplican a cualquier dispositivo, incluidos los teléfonos celulares, y las empresas de juegos en línea no podrán brindar servicios a menores fuera del horario estipulado y deben asegurarse de que han implementado sistemas de verificación de nombres reales de inicio de sesión.

Las acciones de la francesa Ubisoft llegaron a caer un 2,6%, mientras que Prosus, que posee casi el 29% del gigante chino de la tecnología y los juegos Tencent, perdió más de un 6% en Ámsterdam en un momento. Ebracer bajaba un 3,6% y Rovio un 2,3%. Las acciones de Roblox, Activision, Electronic Art y Take-Two Interactive Software, que cotizan en Estados Unidos, perdían entre un 0,4% y un 1,7% en las primeras operaciones en Wall Street.

El mes pasado, Pekín actuó para prohibir a los menores de 18 años jugar con los videojuegos durante más de tres horas a la semana, y el miércoles funcionarios del gobierno convocaron a empresas de juegos como Tencent y NetEase para asegurarse de que implementan las nuevas reglas.

La nueva ofensiva de los reguladores chinos golpeó los precios de las acciones de Tencent y NetEase, que cayeron más del 8% y 13% respectivamente el jueves, arrastrando el índice tecnológico de Hong Kong a su mayor caída desde fines de julio.